Brasilia, 15 mar (Prensa Latina) El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva afirmó hoy que desea ser candidato al poder de un movimiento en Brasil y no solamente del Partido de los Trabajadores (PT).
Al conceder una entrevista a Radio Espinharas, en el municipio Patos del estado de Paraíba (nordeste), el exgobernante confirmó que debería hacer oficial su precandidatura a finales de abril, para poder anunciar el apoyo de otros partidos a su nombre.
«Estoy hablando con mucha gente. No quiero ser un candidato solo del PT, sino de un movimiento», señaló.
Manifestó preocupación por su seguridad en las elecciones de octubre próximo y que su principal oponente, el mandatario Jair Bolsonaro, «solo le gusta la violencia», sin embargo, comunicó, que no dejará de hacer campaña en la calle.
En recientes declaraciones Joaquim Barbosa, exjuez del Supremo Tribunal Federal (STF), alertó sobre la posibilidad de que el exdirigente obrero sufra un atentado por parte de grupos bolsonaristas (partidarios del exmilitar).
Al respecto, Lula apuntó que «todo el mundo sabe el tipo de político que es Bolsonaro», quien mantiene una relación con los milicianos.
«Tengo preocupaciones, pero como soy una persona de gran fe, de gran creencia. Creo sinceramente que el pueblo brasileño dará un golpe de Estado en este país y restaurará la democracia», certificó el líder del PT.
Agregó que «será la muerte política de Bolsonaro de la mano de los votantes brasileños, del pueblo brasileño. Y este país volverá a la esperanza, a la alegría».
Explicó que no jugará al bajo nivel de Bolsonaro y «sinceramente, voy a hacer la campaña que sé hacer, la de la calle, hablar con la gente… la verdad ganará a las fake news (noticias falsas), el libro ganará a las armas y la conciencia política del pueblo ganará», refirió.
Interrogado por la composición con el exgobernador de Sao Paulo Geraldo Alckmin, de quien se espera sea vicepresidente en la lista del PT, respondió que aún el político no se ha unido.
El pasado 2 de marzo, el ministro Ricardo Lewandowski, del STF, derogó la última acción penal contra Lula en el caso sobre un presunto tráfico de influencias en la compra de aviones suecos de combate Gripen, destinados a la Fuerza Aérea.
Después de recuperar sus derechos políticos en marzo de 2021, el expresidente encabeza todas las encuestas de opinión, con más del 42 por ciento de los favoritismos, rumbo a las venideras justas comiciales en las que espera reelegirse Bolsonaro y llegar al poder el exjuez Sérgio Moro.